Fotografías por Iván Casal Nieto (www.ivancasalnieto.com)
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Se parte de un local en planta baja para localizar las oficinas de atención al público para la nueva sede central del Oral con acceso desde la calle y desde el patio de manzana posterior y de un requisito fundamental establecido por el promotor: la colocación de una reja de seguridad que garantice la protección del local las 24 horas del día. Por este motivo, el proyecto gira en torno a sus fachadas.
Fotografías por Iván Casal Nieto (www.ivancasalnieto.com)
La idea parte de la base de cumplir este requisito sin dejar a un lado la parte estética y por ello, el elemento de seguridad deberá formar parte de la fachada. Se plantea una celosía metálica de pletinas verticales lacada en blanco. Tras esta, una enorme cristalera de suelo a techo permite que desde el exterior se tamice la visión y la luz, garantizando una total seguridad, mientras que, desde el interior, la presencia de este elemento se minimiza, permitiendo una visión completa del exterior. El acceso al local se hace en cada un de las fachadas atravesando una parte de la celosía que se ha dejado practicable, que cuando está cerrada funciona como fachada continua.
En el interior se juega con acabados limpios y tonos claros, acordes con la imagen corporativa del cliente. Como acabados se opta por la utilización de un pavimento continuo en tonalidad gris suave, con paramentos y techos en blanco, que nos ayudan a ganar en luminosidad. El espacio interior es diáfano, y se configura con una mampara intermedia siguiendo la línea argumental de las fachadas, disponiendo para los distintos puestos de trabajo mobiliario en líneas rectas.
